RCN Televisión fue el primer medio de comunicación colombiano en llegar a Haití después del terremoto, así lo proclamaron con bombos y platillos, mientras su más inmediata competencia se encontraba aún en la base militar de Catam esperando el avión que junto al Ministro del Interior y un grupo de funcionarios los llevaría a “visitar” el devastado país.
Cuatro periodistas, dos camarógrafos más otro sequito de equipo técnico llegaron el miércoles en la mañana y después de un travesía para llegar pues el tráfico aéreo les impidió llegar directamente al país y los único viajes eran para la ayuda humanitaria y funcionarios del gobierno de diferentes países. Por esto viajaron hasta Santo Domingo (República Dominicana) y al llegar ahí consiguieron un auto para viajar más de 10 horas para ingresar al Haití.
Por su parte a Caracol Televisión, llegó a Haití el viernes al mediodía en compañía de funcionarios del gobierno e instalaron su “base de operaciones” en el Aeropuerto de Puerto Príncipe (capital de Haití) junto a otros medios de comunicación y ahí empezaron a realizar sus emisiones, pero lo que parecería ser algo del primer día mientras contactaban la forma de salir a las calles y realizar las notas periodísticas se convirtió en algo permanente, casi una semana después no se ha visto ningún tipo de informe y noticia hecha por ellos con la gente de Haití.
En el primer fin de semana después del terremoto los periodistas de RCN aumentaron a seis, más dos del canal internacional NTN 24, trabajan juntos, y hasta el momento han conseguido algunas historias conmovedoras, realizando –pese a algunas fallas producidas por la falta de experiencia frente a la gravedad de la noticia y otras por la ignorancia- un cubrimiento periodístico muy superior comparado con los demás medios nacionales que han preferido usar información de noticias de agencias de prensa y no le han dado su toque ni enfoque personal a esta tragedia que ha enlutado la mayoría de corazones del mundo.
Mientras tanto Caracol Televisión con el mismo plano de atrás que utilizaron en Catam pero con un avión diferente de fondo, se han apegando a los informes y entrevistas que hace CNN es Español, su canal aliado, y a las imágenes que le suministran medios internacionales y agencias de prensa como AP y Reuters.
Hasta el momento no ha sacado nada novedoso, no han salido a la calle a hablar con las personas, no se ha parado de frente a esta tragedia, la cual ha sido considerada como la peor de los últimos 10 años en el continente, no se han juntado con aquellos que hoy lloran a sus seres queridos que yacen en el suelo mientras maldicen al cielo por ese destino tan cruel que les ha tocado vivir. Solamente han entrevistado a los oficiales, funcionarios y todo aquel que llegue al aeropuerto, pero de ahí nada más.
Sus noticias son pobres y poco informativas, como si se tratara de cualquier evento común que ocurre todos los días, en cada emisión los dos periodistas demuestran con creces que no se han dado cuenta de la magnitud de los hechos, que desconocen el contexto histórico de Haití, su pobreza, su corrupción y sus deficiencias en los suministros de servicios públicos, tal vez eso se deba a que no han visto las ruinas, los miles de cadáveres que han sido enterrados en una fosa común, no han sentido el olor a muerte, ni han visto a un sólo haitiano gritando y llorando, mientras piden un poco de comida y agua.
No es necesario que salgan llorando en cada emisión, que sus lágrimas caigan por sus mejillas mientras dan la noticia, que su voz se entrecorte cuando estén entrevistando a una persona que lo acaba de perder todo, aunque ellos son humanos y esto puede suceder, como ha varios reporteros internacionales, pero sí es una obligación que se “unten” de aquella tragedia y no miren los toros desde la barrera, porque de esa manera es casi imposible ser imparciales, dar información de calidad y su ética periodística se pondrá gravemente en duda.
LAS COSAS NO CAMBIAN EN LA RADIO
RCN Radio y al FM también llegaron una semana después del terremoto y de inmediato también salieron a las calles a realizar su trabajo periodístico, mientras que Caracol Radio envió a un periodista cuyo nombre no voy a dar pero que curiosamente sus noticias tienen casi siempre tintes de tragedia y quien resultó ser novio de la directora del servicio informativo de aquella cadena. Este periodista al ver que no podía ser instalado en un hotel cinco estrellas se devolvió el mismo día en el avión que trajo al país a un grupo de 12 colombianos, entre ellos cuatro niños, que estaban en Haití y lo perdieron todo en la tragedia.